TOP 20 WOODY ALLEN
Por Nicolás Salas
Hace 83 años, el 1 de diciembre de 1935, nacía en New York el icónico cineasta Woody Allen. Este grandísimo artista cuenta entre sus films con altos y bajos, con obras maestras y filmes mediocres, con joyas memorables y decepciones que quedarán en el olvido. Y tiene que ver con que Allen sigue con el capricho de estrenar una película por año, y a ese ritmo ni el más grande de los guionistas podría sostener tanta genialidad o alardear de una filmografía intachable.
Aun así, es imposible negar la huella inconfundible que ha dejado en la historia del cine, además de recordar miles de momentos que nos ha regalado en sus casi 50 títulos. Si, tantas películas ha realizado que, sinceramente, fue muy difícil elaborar un ranking sin dejar afuera increíbles piezas de arte.
¿Qué tan buena es una película de Allen cuando se compara con el resto de su filmografía? Espero que este ranking de sus 20 mejores películas responda esa duda ¡Feliz cumpleaños para él!
20. ANYTHING ELSE” (2003)
En Jason Biggs, la opción audaz de Allen, encontramos la versión joven del tipo que el cineasta defendió durante la mayor parte de su carrera. El guión crea una maraña filosófica humorística a partir de una situación simple que ocurre en un viaje en taxi. Christina Ricci resulta adorable y Woody Allen está magnífico como el chiflado mentor de Jason Biggs, que a su vez sorprende en un rol algo más “serio” de lo que venía haciendo. Quentin Tarantino lo incluyó de manera desconcertante en su lista de las veinte mejores películas de los tiempos modernos.
19. INTERIORS (1978)
El éxito comercial de su película anterior (“Annie Hall”) solo estableció, más aún, en la mente del director, el deseo de ser capaz de emular a su ídolo: Ingmar Bergman. El hecho es que la película aborda un tema muy fuerte, sin recurrir nunca al ocultamiento necesario del alivio cómico, haciendo que todo sea muy reflexivo y austero. Casi todas sus películas poseen su espíritu, pero esta simplemente no lo tiene. Mujeres, existencialismo, composición milimétrica, primeros planos, drama contenido, secretos, silencio; con todo ello emula al genio sueco.
18. SLEEPER (1973)
Woody Allen se llena de ciencia ficción en esta locura inagotable y anticuada de bromas. El Allen de principios de los años 70 se despierta en un futuro distópico repleto de un líder fascista, robots y, por supuesto, el Orgasmatron. Recluta a Diane Keaton en busca de ayuda para escapar de las autoridades y las dos terminan tratando de derrocar al gobierno. Una escena culminante en un quirófano es una de las mejores piezas inspiradas en los Hermanos Marx de Woody. Allen estaba empezando a mostrar un estado de ánimo más áspero, con gags más elaborados.
17. BANANAS (1971)
La tercera película de Allen como director, Bananas es más una colección de ideas y bocetos que una película coherente. El estilo de Woody Allen todavía se estaba perfilando, pero toda su ironía valerosa, así como su confianza de autor, ya son visibles en esta obra, que puede ser ejemplificada por las referencias que se hacen, como la de la escalera de Odessa en "Battleship Potemkin". El humor es quizás demasiado disperso, y los chistes apuntan a un público muy especializado, para conectarse realmente.
16. BLUE JASMINE (2013)
Desde “Hannah y sus hermanas”, Allen no había creado un personaje femenino tan fuerte. Completamente en sintonía con el mundo actual, el guión establece una sátira social jovial y mordaz, donde el villano es la ciudad de New York. Cate Blanchett ofrece una de sus mejores actuaciones, como una mujer que pasó gran parte de su vida entre las altas esferas de la sociedad y ahora se encuentra abandonada y deberá remarla como una persona normal, en un entorno desfavorable. Cruda reflexión sobre ricos y pobres, la locura y el destino.
15. “STARDUST MEMORIES (1980)
Rodada en blanco y negro, la película trata sobre un cineasta que recuerda su vida y sus amores, mientras asiste a una retrospectiva de su obra. Allen explora uno de los aspectos consecuentes de la fama, la reunión de un séquito de admiradores, algunos incluso fanáticos, que buscan en el director la satisfacción de sus deseos personales, recordándole que prefieren sus obras más divertidas y tempranas, por sobre las nuevas y experimentales. Seguramente es una respuesta del cineasta tras la fría acogida del público a “Interiors”.
14. HUSBANDS AND WIVES (1992)
Película inteligente y triste sobre las incómodas verdades que separan a las personas, algunos hablan de que estuvo inspirada en la ruptura del cineasta con Mia Farrow. Los paralelismos son claros: Woody interpreta a Gabe, un académico fatigado que se enamora de una estudiante (Juliette Lewis), esto amenaza con destruir su matrimonio con la sufrida esposa Judy (Farrow). La cinta es honesta, causalmente ingeniosa y, probablemente, lo más cercano a un confesionario que podamos ver en pantalla.
13. ZELIG (1983)
Con el permiso de “This Is Spinal Tap”, esta cinta es uno de los mejores documentales falsos que se han rodado: técnicamente impecable, emotivo y lleno de hallazgos. Leonard Zelig es un hombre tan cargado de inseguridad que asume la personalidad y las características físicas de quien está al lado; Un camaleón humano. La película en sí lucha con una doble personalidad. Por un lado, sirve para explotar algunos de los mejores chistes de Woody. En el otro, Es una exploración erudita de la identidad judía en la primera parte del siglo XX. La película tiene éxito en ambos aspectos.
12. DECONSTRUCTING HARRY (1997)
La pista está en el título. Una comedia psicoanalítica sobre un escritor (muchas de las películas de Woody se centran en la difícil situación metafísica de los escritores) que se inspira demasiado en la monotonía de la vida. Aquí Harry no tiene con quién ir a la entrega de un premio, entonces secuestra a su hijo, recoge a una prostituta y parte. Durante este viaje, muchos de sus personajes de ficción tomarán vida e irán confundiéndose con la realidad. Un tratado gracioso y malicioso sobre la relación de un escritor con sus propias creaciones.
11. BULLETS OVER BROADWAY (1994)
En la década de 1920, un autor teatral (John Cusack) se ve obligado a aceptar en el elenco de su obra a una joven sin talento (Jennifer Tilly), ya que es la novia de un gángster local. Y como si eso no fuera suficiente, el guardaespaldas de la joven (Chazz Palminteri) interfiere constantemente en el desarrollo de la obra, por lo que el autor deberá zanjar el asunto de una manera particular. El guión es excelente, equilibra perfectamente el amor por el teatro y la crítica a la falta de libertad en el proceso de creación de una obra de arte.
10. RADIO DAYS (1987)
Una nostálgica mirada a la era dorada de la radio y sus varios locutores estrella. Esta película es una pequeña joyita, donde la añoranza que se transmite es tan cautivante que uno termina engatuzado. .El poder de la música para evocar recuerdos sensoriales se evoca de manera sorprendente, logrando que el espectador sienta nostalgia por una época que no ha vivido. El gancho de la película es sin duda la unión familiar en torno a la radio. “Radio Days” es una afortunada, aunque infravalorada, película del cineasta neoyorquino.
9. ANOTHER WOMAN (1988)
Para escribir su nuevo libro, una intelectual de Nueva York alquila un departamento. Su vecino de al lado es psiquiatra, y realiza sus consultas allí, por lo que a través de su apartamento puede escuchar las confesiones de las pacientes, especialmente de una paciente embarazada, lo que intensifica una crisis existencial latente en ella. Allen emula a John Cassavetes, incluso trabajando con su musa, Gena Rowlands, con algunos de los mejores diálogos escritos en su carrera. Es una película íntima e inquisitiva, esencial para todo fan Woody.
8. MIDNIGHT IN PARIS (2011)
Junto con “Radio Days” es la cinta más evocadora de épocas anteriores. La atención al detalle en el diseño de vestuario y producción en una ciudad que mezcla lo antiguo con lo moderno es sumamente ambiciosa. Owen Wilson se enfrenta a Hemingway, Fitzgerald y Buñuel (entre otros), en un viaje en el tiempo donde encontrará la satisfacción individual que no tiene en su presente. Una visión muy madura y emocionante de un cineasta que se niega a abrazar el conformismo creativo, otorgándonos su película más taquillera hasta la fecha.
7. THE PURPLE ROSE OF CAIRO (1985)
Esta es la historia de Cecilia (Mia Farrow), una mujer cuya única distracción consiste en ir al cine para escapar de la realidad; una noche, el protagonista de su película favorita se fijará en ella y atravesará la pantalla para conocerla. Se trata de un relato cinéfilo, donde Woody Allen evoca al cine como una fábrica de sueños. El director retrata la Gran Depresión de los 30 pero con una mirada esperanzadora, en un mundo en el que todo es posible y los sueños se cumplen.
6. MATCH POINT (2005)
Filmada en Inglaterra, “Match Pont” se presenta como un drama ardiente sobre la clase, la pasión y el engaño romántico. El director nos demuestra toda su versatilidad, al salir de sus zonas más comunes y entregarnos una cinta que nada tiene que ver con sus anteriores obras. Chris es un ambicioso tenista retirado que se encapricha con la novia de su amigo millonario, las cosas se salen de control y pronto Chris se da cuenta que todo lo construyó está en peligro. Rhys-Meyers y Johansson forman una asociación mortal en esta cinta donde el azar, la ambición, el sexo y la pasión te dejarán sin respiro.
5. CRIMES AND MISDEMEANORS (1989)
Un médico de Nueva York (Martin Landau) intenta desesperadamente que su esposa no descubra toda una vida de traiciones e infidelidades. Por otro lado, Un documentalista (Allen) lucha contra la tentación mientras produce su nueva película. El director examina el alma humana con diálogos desconcertantes y una fuerte inspiración en Dostoievski, trabajando en dos historias de adulterio. La culpa y el asesinato aparecen como ejes centrales de la obra, con particular énfasis en la historia interpretada por Landau. Años más tarde volvería a un tema similar en "Match Point".
4. HANNAH AND HER SISTERS (1986)
Inspirada en “Fanny y Alexander" de su ídolo Ingmar Bergman, Allen trabaja en la evolución de un núcleo familiar a través de tres celebraciones anuales, justificadas por esta frase que refuerza la cinta: "El corazón es un músculo muy, muy elástico". Esta es una película que se adhiere a temas básicos: el miedo a la muerte, la ansiedad con respecto a la procreación, el deseo de amor, los riesgos de nuestras decisiones. Michael Caine y Dianne Wiest ganaron los Premios de la Academia y Woody ganó uno por mejor guión (una de las quince veces que ha sido nominado para esa categoría, un récord).
3. MANHATTAN MURDER MYSTERY (1993)
La irresistible química entre Woody Allen y Diane Keaton, una de las mejores parejas de películas, hace que el humor brote sutilmente entre los diálogos. Una aburrida ama de casa de Manhattan empieza a sospechar que su vecino asesinó a su esposa, estas sospechas y la búsqueda del asesino no son sino una estupenda excusa para hablar de lo que más le importa a Allen: los dilemas de las relaciones amorosas, la lucha del deseo y lo que es correcto. Acá ningún plano, diálogo o situación sobra, por lo que está prohibido parpadear.
2. ANNIE HALL (1977)
Una de las mejores comedias que se han realizado, le significó al director el Oscar y un reconocimiento a Diane Keaton como mejor actriz. Allen, por primera vez, aparece como un personaje con el que el público puede identificarse. Hay mucho de sí mismo en el guión, acertadamente Woody se desvía del sentimentalismo barato, trasladando el discurso hacia verdades universales y reflexiones ingeniosas sobre la vida y el amor. Con su actuación, Diane Keaton cambió el rol de la mujer en las comedias románticas.
1. MANHATTAN (1979)
El mejor trabajo de Allen como actor. Esta película representa el cierre del primer ciclo de su carrera, después de alcanzar el molde perfecto con "Annie Hall" y aventurarse en su primer drama, "Interiors", "Manhattan" es la unión perfecta de drama, romance y comedia, pionera en lo que muchos llaman la "Fórmula Woody". Una obra maestra. Más que una historia grandilocuente, se trata de una declaración de amor a Nueva York, su ciudad natal. El monólogo introductorio es esencial: esta es la construcción de la Gran Manzana de Woody, la interpretación de su horizonte cada vez que mira por la ventana.