Por Ailu Pelayes

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Estar bajón = ver pelis dramáticas. Esto me pasó hace unos días y me encontré con ¡A ganar!, una peli basada en la historia real que me sacó varias lágrimitas.

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La trama es simplísima: un equipo de vóley femenino de West High School pierde a su jugadora estrella, Caroline 'Line' Found, en un trágico accidente. Justo están disputando el torneo estatal y tienen que recomponerse para intentar ganarlo, por lo tanto, las chicas deciden que vencer será el mejor homenaje que pueden hacerle a Line y se ponen a full a entrenar.

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Con las actuaciones de Helen Hunt como entrenadora, William Hurt en el rol del padre de Line, Erin Moriarty protagonizando a Kelly, clave en la recuperación del equipo, y Danika Yorosh en la piel de Line, vemos un tributo donde en más de un momento vamos a sentir una lágrima caer o un nudo en la garganta.

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La estrella de esta peli es Caroline, “Line” para los amigos, la capitana y el alma del equipo de vóley. Ella siempre tenía una sonrisa o una broma para ofrecer, con un entusiasmo contagioso y desenfrenado, llena de planes a futuro. Line sabía vivir la vida.

Su mejor amiga es Kelly, protagonizada por Erin Moriarty, y es quien levanta al equipo que quedó devastado y, junto a la entrenadora, van a luchar contra todos con tal de ganar el torneo escolar porque “es lo que Line hubiera querido”. Luego van a entender que no deben ganar por Line, sino vivir como ella.

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Que The Miracle Season esté basada en una historia real hace que sea difícil de criticar, sin embargo, podemos decir que es enérgica y al mismo tiempo emocionante, llena de actitud positiva y discursos inspiradores. Si bien no es perfecta ni estéticamente ni en relación al contenido, es una bella historia.

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Quien haya experimentado el dolor de una pérdida sabe lo terrible que se siente y cómo la vida, hasta por momentos, pierde sentido. Salir adelante lleva tiempo, pero es necesario no hundirse en el dolor. Esto es exactamente lo que vemos en los personajes de la peli, mientras siguen sufriendo por la muerte de la joven, cada uno decide vivir un poco como Line.

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Si sos de lágrima fácil como yo, agarrá los pañuelitos y no te pierdas esta historia que te va a llegar al corazón.

 

Lo mejor:

• Buenas actuaciones, empatizamos con los personajes y sufrimos a la par.

• Discursos motivacionales que te llenan de vitalidad.

• Los créditos, lloré como bebé.

 

Lo peor:

• No sorprende y pareciera que está todo hiper calculado.

• Tiene subtramas que no están bien desarrolladas, pasa todo rapidísmo.

• No siento que sea una historia para contar en una película, pero funciona y emociona.